Nuestras vacaciones en Casa De Esteiro fueron épicas! Primero, visitamos la hermosa playa que está muy cerca. ¡Las olas eran perfectas para hacer surf! Luego, fuimos de fiesta al animado pueblo de Caminha. ¡Las discotecas estaban llenas de música y diversión! Definitivamente, volveremos el verano próximo para disfrutar de la piscina y más playa. ¡El personal fue super amable y nos ayudó con todo!

Si tuviera que pedir algo más, sería genial tener un poco más de entretenimiento nocturno en el propio alojamiento. ¡Unas fiestas temáticas o música en vivo serían increíbles para los jóvenes como nosotros!

Disfruté de la amabilidad del personal y el dueño, quienes se esforzaron por hacerme sentir como en casa. Además, el lugar es realmente hermoso, con una casa antigua y señorial rodeada de un jardín frondoso. Me encantó poder relajarme en la piscina y disfrutar de la belleza del entorno.

En cuanto al desayuno, eché en falta más variedad de opciones, como bollos o dulces. noté que algunas instalaciones del apartamento eran antiguas y deterioradas, como las paredes desconchadas y los muebles viejos.

La casa principal es del siglo XVIII/decorada en estilo clásico. El entorno es maravilloso.La cocina ha sido renovada.La zona de la piscina es muy agradable.El personal es encantador.Las camas son cómodas.El desayuno es bueno.La playa está cerca.

No se me ocurre nada.

Un lugar hermoso y tranquilo, rodeado de árboles centenarios y cerca de las playas. Un servicio magnífico y un personal atento y amable. Ideal para llevar a tus mascotas.

Me sentí como si estuviera con mi familia, no tengo ninguna pega.

Siempre vuelvo a este hotel porque el personal me ayudó con las maletas la primera vez. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis, estacionamiento gratuito, hervidor eléctrico, utensilios de cocina, TV de pantalla plana, ciclismo. Volveré para Navidad.

Nos encantó la zona de la piscina y la terraza del apartamento cuando salió el sol. nos alegró poder llevar a nuestros perros y que tuvieran espacio para correr cerca. La atención y el servicio del propietario y el personal fueron magníficos, lo cual hizo nuestra estancia fácil y agradable. Definitivamente volveremos.

acceso difícil con vehículo.

Personal amable y servicial que hace que la estancia sea fácil y agradable. Magnífica atención y servicio por parte del propietario y las empleadas Filomena, Lucrecia y Laurinda.- Zona tranquila y apacible, cercana al centro de Caminha y a dos estupendas playas.

Qué pasada de experiencia! La cama era súper cómoda y el desayuno se servía en un comedor que parecía un museo. La casa principal, una maravilla del siglo XVIII, estaba decorada con antigüedades increíbles. Además, la playa estaba súper cerca y el centro del pueblo no estaba muy lejos. En general, todo nos encantó: las camas, la ubicación, el buen desayuno y sobre todo, la casa llena de historia y antigüedades. Estamos deseando volver en verano para disfrutar de la piscina y la playa. El personal fue encantador, siempre dispuesto a ayudarnos y recomendarnos lugares para visitar. ¡Además, pudimos llevar a nuestra perrita sin problemas! La piscina justo frente al apartamento rodeado de árboles centenarios era alucinante. La conexión wi-fi funcionaba genial, el personal fue muy amable y la ubicación entre el pueblo y la playa era perfecta. ¡Tuvimos mucha suerte con el tiempo y disfrutamos de unas puestas de sol increíbles! En definitiva, una experiencia súper positiva en todos los sentidos.

Naturaleza y belleza, arboles centenarios, cerca del centro de Caminha y de dos playas, atención y servicio magníficos, personal amable y cariñoso, casa decorada en estilo clásico.

Nada negativo.

Nos encantó todo en general, desde las camas cómodas hasta la ubicación cerca del pueblo. El desayuno fue excelente y la casa principal es una verdadera joya llena de antigüedades. Sin duda volveremos en verano para disfrutar de la piscina y la cercana playa. El personal fue encantador, siempre dispuesto a ayudarnos y darnos indicaciones de lugares para visitar.

Lo recomiendo.

Me encantó la amabilidad del personal y el ambiente acogedor que se respiraba en el hotel. El jardín frondoso y bien cuidado era un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza. Además, la piscina era un oasis refrescante en los días calurosos. ¡Fue genial poder disfrutar de un chapuzón y tomar el sol! me gustó mucho la tranquilidad del entorno, lejos del bullicio de la ciudad. Era el lugar perfecto para desconectar y disfrutar de la paz y la tranquilidad.

Hubo algunos aspectos que podrían mejorar. El apartamento en el que me alojé parecía un poco viejo y descuidado, con paredes desconchadas y un olor a humedad persistente.

Mi estancia en Casa De Esteiro fue muy agradable. Me encantó la ubicación, estaba muy cerca del pueblo y de la playa. Las camas eran cómodas y el desayuno era bueno. me impresionó la casa principal, llena de antigüedades, era una verdadera joya. El personal era encantador, siempre dispuesto a ayudar y darme indicaciones sobre lugares para visitar. Definitivamente volveré en verano para disfrutar de la piscina y la playa.

Debo mencionar que hubo algunos problemas con las instalaciones durante mi estancia. El primer día no hubo agua caliente, el segundo día hubo problemas con el baño y la electricidad, y el tercer día hubo problemas con el agua caliente y las lámparas daban descargas.

Me encantaron los alrededores del hotel, rodeado de naturaleza y con una ubicación privilegiada cerca de atracciones clave. disfruté mucho de la piscina, que era muy agradable para relajarse. Además, el personal y el equipo de este hotel brindaron un trato exquisito, lo que mejoró aún más mi experiencia.

Hubo algunas cosas que no me gustaron tanto. La habitación tenía un ligero olor a humedad y la limpieza no era la mejor.

Hermosos jardines, desayuno en casa principal con antigüedades, anfitrión amable, trabajadoras acogedoras. Ambiente de museo, playas bonitas y pueblo encantador. Excursión en barco a fuerte de insua, auténtica experiencia. Gastronomía portuguesa buena y precios excelentes. Estancia muy agradable.

Cómodas camas, desayuno en un comedor lleno de antigüedades, personal encantador, cerca de la playa y del pueblo, maravillosos jardines.

Nada negativo.